LO QUE SALE DE LA PELOTA
miércoles, 3 de julio de 2013
OLAIZOLA II - Mtnz.de IRUJO
Juan Martinez de Irujo
"No he estado metido en el partido en ningún momento. No estaba con la tensión que había que tener en una final ni centrado. Se me ha pasado el partido volando. No me he enterado de la fiesta, he estado fuera totalmente"
"He estado tranquilo desde el principio, con ganas. Pero no he estado cómodo en ninguna fase del partido"
"La clave ha estado en que no le he dado con la derecha, no le he dado velocidad y no he dominado a Aimar. He dado dos o tres pelotazos buenos con los que le he hecho tanto, que le he dominado, pero poco más"
"No le di nada desde el tanto cero hasta el último, por lo que la clave estuvo ahí".
"Aimar ha hecho su partido, a esperar también al fallo, y ha defendido muchísimo"
Aimar Olaizola,
que ha dedicado el triunfo a su 'Aita' fallecido, ha hecho hincapié en que lo importante era la victoria, más que lucirse:
"Este tipo de partidos no son para jugar bonito, son para llegar a 22, para ganarlos, y si juegas así, más contento"
"Con este tipo de pelota, con el saque se hace mucho daño. He acertado más a la hora de sacar"
"Ha sido un partido perfecto, me ha salido muy bien"
RECOGIDO en el "noticias de Álava"
Al parecer,
Irujo salió con ganas de pegarle fuerte a la pelota con velocidad y dominar así el tanto, es decir, más o menos traducido que Olaizola II se mantenga lo más lejos del frontis y luego era cuestión de acabar --¿rematar?-- el tanto; un gancho, una volea, una dejada, un golpe definitivo y ya está, partido ganado.
Razón tiene Joxan Tolosa que la Paciencia, además de necesaria, escasea muchas veces en la vida misma como en las canchas. El Deporte Profesional es un Trabajo, y a trabajar hay que salir, y el objetivo primero de cada pelotazo que das, como en cualquier otro trabajo, es hacerlo bien, no fallar, poner como primera Voluntad que vaya a buena, ya luego se verá lo que "Dios" dirá.
En la mayoría de trabajos, por los que conozco e imagino, tienes un tiempo determinado para realizar cualquier cosa, pero en Pelota no tenemos un tiempo para perder o ganar porque no se valora lo que tardas sino la calidad, lo bien que lo hagas para llegar, por ejemplo, a 22 tantos. La prisa por ganar, por acabar el tanto cuanto antes, es la Impaciencia, la fábrica de fallos y errores más grande del mundo.
En el caso que jugamos, prisa y ansiedad buscando el aire al primer saque, y también miedo si se encoje el brazo al primer fallo. Así es imposible estar "centrado", con estas emociones y con la intención quizá clara, "dominar al contrario", pero poco acertado pues el objetivo no es dominarle ni ganarle a nadie, sino enviar la pelota a buena donde al contrario peor le venga.
Querida Pelota, valoro tu dureza, cómo te acoplas a mis manos con tu forma perfecta y, principalmente, tu fidelidad, pues vas, aún a pelotazos, exactamente donde te mandamos. Pelota pelotita, seguro que te encanta jugar, así que ¿porqué no jugamos con esa otra persona?; ¿Será capaz de llegar donde te envíe, de alcanzarte en la dejada, devolverte al frontis desde el 9 o de tocarte cuando corras hacia las gradas.
Efectivamente, en un partido todos esperamos el fallo del contrario, no sólo Aimar, y más si estás cansado de pelotear. Y claro, unas personas se cansan físicamente antes que otras, y con la Paciencia, que es de tono mental, pasa igual, que te olvidas de hacer buena, que quieres acabar, dejas lo que es arriesgar para pasarte y arriesgar de más.
El resultado de cualquier pelotazo depende también de nuestra actitud, tanto ante la vida como hacia el juego, de la intención y el sentimiento que ponemos en lo que hacemos. Y no serán la ansiedad ni el miedo quienes nos llevarán al 22.
En breve jugarán la Final del 4 y Medio Navarro. Veremos qué ocurre. Si se puede.
martes, 18 de junio de 2013
LA PELOTA
LA PELOTA
tiene forma de esfera, es decir, que es redonda por donde quiera que la veas, la cojas, la toques o la golpees (no es el caso de la foto que está agotada, con la lengua fuera).
La Pelota no tiene una cara sonriente y otra cara enfadada; puede tener mil caras, pero todas expresan lo mismo, aquello que ponemos en ella cuando la miramos en el cestaño, rodando o volando, cuando la cogemos, la sentimos y abrazamos con los dedos de las manos, y también después, la Pelota siempre lleva lo que tú le pongas, igual que trae lo que le ha puesto quien te la haya enviado.
En este sentido, por ejemplo en un frontón, la Pelota actúa de mensajera entre las personas que juegan el partido. Un trabajo duro, pues los mensajes se envían y reciben previo golpeo con la mano y después contra la pared de enfrente, el frontis, lo que no cede por muy fuerte y de mala leche que le des.
Por un lado, a nadie le gusta que le golpeen con rabia, y no es raro que si alguien insiste en ese tono ya no quieres ni que te toquen. Por otro lado, no hay más que verle cómo rueda y se mueve la Pelota para darse cuenta de que le gusta jugar, le encanta, igual o más que a nosotros con ella. Y me pregunto, ¿a qué le gusta jugar a la Pelota en un frontón?:
¿"A coger"?
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